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Raquel Robleda

Emprendiendo con propósito

La revista Competitividad Empresarial de APEDE me invitó a contar mi historia, la de LOOP Xperts y por qué decidí emprender, siempre con propósito. Un 2019 cargado de grandes logros, éxitos y muchos desafíos para 2020.

Soy parte de los Rostros que sueñan la Ciudad – 500 años de la Ciudad de Panamá

2019 – año de mucho emprendimiento, de experiencia y de crecimiento profesional. Ha sido un honor formar parte del proyecto Rostros que Sueñan la Ciudad, dirigido por Daniela Truzman.  Un compendio de voces, rostros y lugares que suman mucho orgullo de ser panameños y panameñas que seguimos soñando cada día con un Panamá mejor, con un Panamá de sueños para las futuras generaciones.

Y el paseo a la Cinta Costera, sin duda uno de mis lugares favoritos de la ciudad, con mi acompañante permanente, fue excelente y la disfruté muchísimo.

Aquí dejo algunos de esos momentos mientras se hacía la sesión de fotos para el libro. 

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La gran experiencia – Diplomado de Gestión de la RS y Crisis

El balance de un año más enseñando ha sido estupendo.  El Diplomado es un éxito gracias a los alumnos que nos han acompañado y han puesto todo su esfuerzo y dedicación por dos años consecutivos.  Las fotos hablan por sí solas y las selfies son la prueba de que estos profesionales jóvenes han estado encantados de enriquecer sus conocimientos en Responsabilidad Social y Gestión de Crisis, en la Facultad de Economía de la Universidad de Panamá.

 

 

Como Directora de LOOP Xperts estoy encantada de aportar a la sociedad promoviendo iniciativas educativas y de formación para profesionales interesados en el desarrollo sostenible, junto con mi amiga y también Xpert Dacil Acevedo.

 

Foro Transparencia para Competitividad APEDE

Foro Apede – Transparencia para la Competitividad

Por: Raquel Robleda – Directora Loop Xperts

Es inevitable mencionar en un foro de transparencia para la competitividad, uno de los principales fenómenos que nos impide ser competitivos. Y no se trata de algo reciente si recordamos que el ex-presidente de Colombia, Julio Cesar Turbay Ayala quién gobernó entre 1978 y 1982 dijo “tenemos que reducir la corrupción a sus justas dimensiones”. Esta frase es considerada uno de los más grandes errores de comunicación que existen, y recientemente otros presidentes latinoamericanos han cometido errores parecidos al no articular sus mensajes de forma correcta.

Todo un escándalo y muy poco ético, pero que no dista mucho del pensamiento escandaloso de muchos. El Dr. Bernardo Kliksberg, padre de la Gerencia Social nos habla permanentemente de escándalos éticos y señala la pobreza y la desigualdad como dos de estos escándalos, y por supuesto que la corrupción es un altísimo generador de pobreza y desigualdad.

Algunos datos escandalosos son los 800 millones de personas que ganan menos de 1.25 dólares y viven en pobreza extrema – carecen de alimentos, sanidad y agua potable /los 3mil millones viven en pobreza – quiere decir que no consiguen cubrir sus necesidades básicas / mil millones son niños y uno de cada 3 de esos niños viven en América Latina. Según Oxfam internacional, 7 de cada 10 personas viven en países donde la desigualdad aumentó en los últimos 30 años, y Panamá aparece como el segundo país más desigual de América Latina según el BID.

Cuando escucho estos datos, me pregunto ¿dónde empieza y dónde termina la ética? La ética es el corazón de la responsabilidad social, la cual tiene que ser una estrategia compartida de Gobierno, empresa y sociedad.

Los ODS nos llaman a hacer alianzas y establecer reglas claras de Gobierno Corporativo, un tema que no es exclusivo de las empresas; esas figuritas de colores llamativos con las que todos queremos tener fotos, nos llaman a combatir la desigualdad, fortaleciendo la educación, la salud, la seguridad. Los ODS son la guía para implementar una estrategia de país que nos lleve a ser más competitivos, a mejorar la calidad de vida de las personas y a proteger nuestra casa común – tal como se refiere a nuestro planeta el Papa Francisco en su Laudato Si, en donde nos propone establecer diálogo sobre el medio ambiente en la política internacional que responda a las necesidades y a las expectativas y alentar también el diálogo hacia las políticas nacionales y locales. Propone también incorporar la responsabilidad ambiental y social a la hora de evaluar y analizar la actuación de las empresas y en particular el impacto ambiental de cada nuevo proyecto.

El reto más grande que tenemos es distribuir la riqueza, y el desafío es cómo utilizar la tecnología como una oportunidad. Cómo generamos valor sostenible en las empresas, cómo enfrentamos las transformaciones que nos vienen con la evolución de la tecnología que está supuesta a sustituir muchos puestos de trabajo como los conocemos hoy en día y cómo entrenar al talento humano y crear cultura para construir reputación. De todo esto se trata la competitividad.

 

 

Reputación en las empresas

Nos dice Alfonso Alcántara (Yoriento.com), que La marca es el perfume que usas, la reputación, el olor que dejas.

Hemos pasado de la empresa narcisista de Friedman, que solo se enfocaba en ganar dinero para sus dueños, a una empresa filantrópica que se preocupaba por causas específicas como museos, expresiones artísticas, universidades y obras bonitas que de alguna manera aportaban a la sociedad, pero este tipo de empresa de finales del siglo XX y principios del XXI empezó a quedarse corta.

¿Por qué? La sociedad y las condiciones del planeta empezaron a exigir una empresa más comprometida con su entorno y con la Gente. ¿Qué se exige la Responsabilidad Social y por qué debe estar en el ADN de la empresa?

La RS empieza por casa. Hablamos de trabajo digno, equilibrio familia-trabajo, equidad de género e igualdad, acceso de la mujer a posiciones directivas…. La tecnología nos ha favorecido en este sentido.

Gobierno Corporativo. Aquí hay tres temas clave: ética, políticas para una gobernanza consolidada que pueda rendir cuentas y transparencia. Seguimos en casa… hay que hacerlo bien y construir una gestión responsable. Si no hay una gestión responsable, ¿Qué tipo de historia vamos a contar?

Juego Limpio con el consumidor. Y un ejemplo que me lleva a hablar de país: Panamá tiene que hacer algo con este tema que incrementa la desigualdad – no puede ser que paguemos los medicamentos más caros de la región. La reputación no es exclusiva de las empresas.

¿Qué queremos ser? es la pregunta acertada, no ¿cómo queremos que nos vean? Esto aplica para la construcción de reputación en los 3 sectores: gobierno, empresa y sociedad.

Protección del medio ambiente – esto lo tenemos bastante claro aunque hay mucha oportunidad de mejora en nuestro país. Un sistema eficiente de recolección de los desechos a nivel nacional, por ejemplo. Podemos llegar a entender que la economía circular genera grandes oportunidades de negocios, pero hay que tener la voluntad de legislar. Atendamos el llamado de la Tierra nos dice el Papa Francisco, y también niños y gente joven como Greta Thunberg. ¿Qué entorno queremos construir en ese camino hacia la reputación?

Grandes temas de bienestar común – la empresa privada que mira hacia adentro y hace las cosas bien construye historias de éxito para contar, pero necesita políticas públicas para seguir con la tarea, y no podemos pretender que la empresa cumpla las funciones del Gobierno. Puede contribuir: tecnología, transferencia de conocimiento, capacitación y complementar la responsabilidad en educación, trabajo, salud, entre otros. #ODS 17 es fundamental para igualar los desafíos. ¿Cómo beneficia a la empresa este tipo de alianzas y fortalece su reputación?

No practicar un doble código de ética. Hay que hacerlo bien para poder contarlo bien. Coherencia entre el discurso de responsabilidad social y la práctica.

Los key players siempre son los stakeholders. ¿Cómo preservar la reputación sin dialogar con ellos? Y allí tenemos que valorar los canales y las plataformas de comunicación además del diálogo directo, las redes sociales juegan un papel fundamental.

Para construir una buena reputación hay que considerar:

  • Legitimidad del público
  • Compromiso de los empleados
  • Valor desde los inversionistas
  • Lealtad del cliente

Todos son stakeholders. En cada renglón estamos hablando de satisfacer necesidades de personas y de seres humanos. Lo que está claro es que trabajar de la mano con estos valores y estrategias, traerá beneficios económicos al negocio.

Hay 5 claves para tener claro el futuro de las organizaciones y poder contar historias de éxito:

  • Desarrollo sostenible (en la semana RSE, el Gerente de Banco General dijo que la sostenibilidad debe ser a largo plazo y es rentable)
  • Cultura corporativa del futuro – dijo Ricaurte Vasquez en la misma semana que el desarrollo debe ser sostenible en la medida en que tomemos decisiones de largo plazo, ajustemos las de corto plazo para ser conscientes de esto.

Necesitamos comprender el activismo social y empresarial – los verdaderos líderes de esto son cada uno de los trabajadores de cada empresa que se suman a estos cambios. Son los que están ahí empujando con valor, ética y conciencia, nos dijo Stanley Motta.

Propósito corporativo – Debemos tener en cuenta que para que una empresa sea exitosa no puede operar en sociedades fracasadas. La capacitación continua y la sensibilización hacen la diferencia, comentó Bruno Basile.

Confianza y Reputación – yo digo que lo que nos conecta es la empatía pero esa la genera la comunicación y la cercanía con las personas siempre y cuando entendamos que somos cada uno de nosotros la clave de la confianza y nuestras acciones y comportamiento la clave para el éxito.

La Comunicación es clave para construir reputación, pero sin ética no se consolida el comportamiento que nos haga exitosos en la vida y en los negocios.

 

 

 

 

 

Liderazgo empresarial y sostenibilidad

Liderazgo para el crecimiento empresarial

Por: Raquel Robleda – Directora Loop Xperts

El mundo que habitamos nos presenta avances impresionantes, pero tambien grandes desafios. Tenemos un desarrollo tecnológico, industrial y humano sin precedentes, pero esta Era Digital nos ha llevado también a experimentar“conmoción” por los acontecimientos sociales, económicos y ambientales que viven los países en todas las regiones del mundo y en todos los niveles de desarrollo.

 

Estos acontecimientos están directamente relacionados con las tres áreas de la Responsabilidad Social, la cual señalamos como una estrategia compartida de Gobierno, empresa y sociedad. Lo que está claro es que nuestro entorno nos define.

Al hablar de crecimiento económico y desarrollo empresarial nos surgen de inmediato muchas preguntas en cuanto a las estrategias, acciones e ideas innovadoras que nos permitan avanzar y crecer empresarialmente en medio de los pronósticos que los informes y expertos dan sobre el mundo.

Sin duda alguna, las empresas son un eslabón del ese entorno, y queremos pensar que existen para aportar soluciones a las necesidades humanas, ofreciendo servicios o productos dirigidos a satisfacer necesidades o deseos, obteniendo un lucro o beneficio económico a partir de ello. Todas las empresas buscan producir dinero, cuentas ascendentes e informes de ventas y facturación positivos y basan el éxito empresarial en esto.

 

La clave son las personas, el  elemento clave y por supuesto la evaluación del entorno donde crecen y se desenvuelven.  Esto es Responsabilidad Social Empresarial, un nuevo modelo de gestión de negocios, regido por el comportamiento socialmente responsable, es decir hacemos las cosas bien y más allá de lo que nos exige la ley.

Enfrentamos desafíos tecnológicos importantes. La tecnología ha avanzado a una velocidad inesperada y la realidad que nos presenta es compleja porque ahora la comunicación cobra mayor valor. Ahora no hay controles de información, ahora hay redes sociales.

Y en este mundo conmocionado por muchas razones, los factores de riesgo son más y donde quiera que opere una empresa tendrá que verse obligada a gestionarlos:

  • Vivimos en un mundo con 821 millones de personas que viven con hambre, teniendo la capacidad de generar alimentos para 9 mil millones de personas.
  • Vivimos en un mundo en el que 411 millones de personas son afectadas anualmente por desastres naturales.
  • Vivimos en un mundo con 1,000 millones de personas sin acceso a agua potable (40 millones AL).
  • Vivimos en un mundo con 3,000 millones de personas con condición de pobreza; 70 millones de niños y niñas son pobres en América Latina.

Estos son los escándalos éticos de los que nos habla de manera permanente el Maestro Bernardo Kliksberg, y las empresas no escapan a los retos que estos nos imponen como sociedad de la conmoción.

Definitivamente que la RSE nos marca un camino distinto, y está claro que las empresas no pueden hacerlo solas por eso hay que generar relaciones y demandas del entorno y de los otros dos sectores: Gobierno y sociedad.  #ODS 17.

Garantizar  el crecimiento de las empresas en un mundo conmocionado, es posible, esto se logra a través de líderes que estén dispuestos a asumir un comportamiento socialmente responsable, considerando que la sostenibilidad es la capacidad de  satisfacer las necesidades y deseos de la generación presente, sin afectar o poner en riesgo la capacidad y recursos de las futuras generaciones

Recordemos que una empresa o entidad se rige por actuaciones humanas, cada día es más relevante contar con líderes que reflejen coherencia en sus actuaciones. Que actúen de manera responsable para con sus clientes, colaboradores, accionistas y con la sociedad en general. Que consideren el entorno y el medio ambiente como esenciales para hacer prosperar las empresas.

Una gestión sostenible implica actuar y tomar decisiones basados en la justicia, la ética, la congruencia, empatía implica que vivir en un “estado de derecho” nos hace co-responsables de la gestión de nuestros entornos, y nos obliga también a cumplir con las normas y regulaciones que rigen a nuestra sociedad.

Es posible liderar impulsando iniciativas que transfieran conocimiento, información y capacidades a los colaboradores, clientes, y actores sociales; empoderando a través de iniciativas que desarrollen confianza, impulsando alianza que nos lleven a trabajar por metas comunes, colectivas, con menor esfuerzo, y optimizando recursos.

Generar el crecimiento empresarial es posible construyendo alianzas con otras entidades o actores sociales y económicos, que compartan nuestras metas y valores, que al igual que nosotros se preocupen y busquen mejorar las condiciones de vida de las personas. Esto es responsabilidad social.

Mucha gente quiere un mejor país, mejores comunidades, mejores gobiernos y mejores empresas; ¡pero es imposible tener una mejor sociedad, sin tener primero mejores personas!

 

Diplomado Gestión de Crisis y RS – UP Facultad de Economía

UNIVERSIDAD DE PANAMÁ – FACULTAD DE ECONOMÍA

COMUNICADO DE PRENSA

Se lanza 2da. Edición del Diplomado de Gestión de Crisis y Responsabilidad Social con conferencia magistral del Dr. Bernardo Kliksberg

Panamá, 28 de marzo de 2019.  En el marco, de la conferencia magistral del Dr. Bernardo Kliksberg, Padre de la Gerencia Social  y pionero de la Responsabilidad Social Empresarial (RSE) en América Latina y doctor en ciencias de la economía, se llevó a cabo el lanzamiento de la segunda edición del Diplomado de Gestión de Crisis y Responsabilidad Social en la Facultad de Economía de la Universidad de Panamá.

El Dr. Kliksberg en su intervención sobre el costo de la corrupción para el desarrollo sostenible de América Latina expresó “el fin de la responsabilidad social es el desarrollo sostenible.  Los estudios econométricos existentes en el mundo indican que a mayor desigualdad en una sociedad, mayor es la corrupción. Se estima que el aumento en un punto en el índice de corrupción, hace aumentar el coeficiente de Gini de desigualdad en 5,4 puntos. Por ello, para actuar contra la corrupción, se requiere un enfoque integral y estructural de sus causas”. El Dr. Kliksberg invitó a trabajar juntos por una sociedad más equitativa, lo cual resaltó garantizará una participación de las mayorías en la educación, la salud, la información y la incidencia en las decisiones. “Con una ciudadanía empoderada e informada, es que combatimos la corrupción”

El Diplomado que este año inicia su segunda edición, está enfocado en la Economía Circular y la Responsabilidad Social como modelos de Gestión aplicables a todos los sectores de negocios, empresariales, institucionales y de cualquier organización en la tan llamada Era de la Información y de la Hiper-trasnparencia.

Para Raquel Robleda, profesora titular del Diplomado y Lider de LoopXPers auspiciante del diplomado, “ha sido todo un logro que la principal casa de estudios de este país, desde su Facultad de Economía haya decidido plantear la responsabilidad social como parte de sus planes de estudio de educación continua. La Responsabilidad Social debe ser vista como una estrategia compartida de Gobierno, empresa y sociedad y las alianzas público-privadas son fundamendametales para trabajar en beneficio del desarrollo sostenible del país.  Con voluntad podemos lograr grandes cambios y el mejor lugar para agregar valor y marcar grandes diferencias es la Universidad”.

“Nuestra apuesta es formar a la nueva generación de profesionales que liderarán los cambios de fondo que requiere el país para lograr un verdadero desarrollo sostenible. Desde la Facultad de Economía, promovemos un enfoque basado en la ética empresarial como base para los negocios responsables.Sólo de ésta manera lograremos un Panamá que en simultáneo logre ser económicamente competitivo, ambientalmente sostenible y socialmente inclusivo” agregó Dacil Acevedo, también profesora titular del Diplomado y Socia de Estrategia & Sostenibilidad de Sinergia507.

Al concluir el Diplomado, el participante estará en condición de definir un plan estratégico para cualquier organización (empresa, ONG, Institución de Gobierno y/o Asociación), basado en los principios de Responsabilidad Social y Economía Circular, tomando como referencia y marco teórico las normas voluntarias de aplicación existentes.

Sobre el Dr. Kliksberg en la Universidad de Panamá

Hay tres mensajes que me quedan claros después de tanta información que nos ha dejado nuestro invitado, el Dr. Bernardo Kilksberg:

  • La responsabilidad social se está transformando, de manera creciente, en una variable competitiva de reconocimiento mundial. Un factor de éxito en los negocios, que se conjuga con el compromiso ético de la empresa moderna con la sociedad.
  • La conducción socialmente responsable de una empresa, genera decisiones de negocios mejor informadas, contribuye a la rentabilidad y la construcción de reputación de manera exitosa y agrega valor en todos los sentidos.
  • Queda claro que se trata de un eje transversal a toda la empresa, institución u organización e incide para bien y para mal en los resultados del negocio.

 

La Responsabilidad Social es la materia más importante de nuestro siglo

En la Universidad de Panamá, durante el lanzamiento del Diplomado en Gestión de Crisis y Responsabilidad Social resalté tres temas fundamentales que nos dejan claro que esta es una de las materias más importantes que nos ocupan en la actualidad.

  1. Políticas Públicas – reiteré una vez más que coincido con colegas como Dacil Acevedo y Juan Carlos Córdoba de Sinergia507 que el ODS 17 es el más retador para Panamá. Se ha hecho un buen trabajo con el Plan estratégico Nacional con Visión de Estado, alineando el desarrollo nacional con los ODS – un documento de la concertación nacional. Definitivamente es un gran avance que debemos al liderazgo de nuestra Ministra en el momento de Desarrollo Social, Michelle Muschett.   Tenemos un avance, y ahora nuestro país necesita pensar, analizar y avanzar en la misma dirección y con una estrategia compartida. Las políticas públicas deben alinearse hacia los intereses de desarrollo sostenible, no a lo que al gobierno de turno le parece que está bien para un quinquenio. Necesitamos construir a corto, mediano y largo plazo en todos los sectores y necesitamos que las leyes y políticas se alineen con los 17 ODS y sus 169 metas. Y sí hace falta un diagnóstico que enmarque nuestras leyes en las 3 dimensiones: económica, social y medioambiental.  Lástima que el Consejo Consultivo de Responsabilidad Social que se propuso para la Asamblea Nacional de Diputados no le ha interesado a ninguno delos Diputados… a ustedes les resultará extraño, pero existe y se propuso de la mano de SUMARSE, APEDE, OEA… necesitamos que funcione. Aquí veo algunos candidatos – se los dejo sobre la mesa.
  2. Economía – no vamos a filosofar sobre su significado y su alcance. En palabras sencillas siempre digo que todo parte de una ecuación matemática (con números o con palabras)… La Responsabilidad Social y el concepto de Economía Circular simplemente son indispensables. Si a esto le sumamos la retribución en términos de reputación al entrar a comunicar resultados, las ventajas se multiplican. Pero, los resultados hay que crearlos primero. Por ende podemos decir que el éxito en los negocios es el resultado de una ecuación perfecta: hacer las cosas bien + saber contarlas bien, y el orden de los factores altera el producto. La alteración de dicho producto generalmente lleva como resultado: una crisis con altísimo impacto de reputación y riesgo en la operación. A diferencia de la connotación exclusiva de labor social que insisten en darle, la responsabilidad social nos dice cómo hacerlo bien… el modelo de gestión para una Gobernanza correcta y este es punto de partida más importante de este modelo de gestión.
  3. La RS es una estrategia compartida – de Gobierno, empresa y sociedad. Esa debe ser la esencia de la Responsabilidad Social y de esas alianzas público-privadas de las que tanto hablamos. Hay modelos que podemos rescatar o crear el propio, pero es importante que la Universidad, las empresas y el gobierno sumen esfuerzos y trabajen de manera conjunta.  No estoy hablando nada extraño – harían gran honor al ODS 17.  Una vez me preguntaron en una entrevista qué nosh ace falta, y la primera palabra que se me vino a la mente fue: VOLUNTAD… de todos los sectores – y no excluyo a nadie.
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